Misterio y preocupación rodean la desaparición de un submarino turístico durante su expedición hacia las ruinas del Titanic. El domingo, luego de un descenso esperado con una duración de una hora y 45 minutos, el submarino de nombre Titán perdió todo contacto con la nave base, generando angustia entre los familiares, autoridades y la empresa responsable, OceanGate.

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Titán, con cinco personas a bordo, partió en un viaje por el Atlántico con la intención de acercarse a los restos históricos del famoso trasatlántico hundido. Sin embargo, tras ese fatídico momento, el silencio y la incertidumbre se apoderaron de la situación.

La empresa OceanGate, en estrecha colaboración con las autoridades competentes, está llevando a cabo un despliegue de recursos para localizar y rescatar al piloto y a los cuatro especialistas en misión. 

El contralmirante John Mauger, comandante del Primer Distrito de la Guardia Costera de Estados Unidos, aseguró que se están implementando todas las medidas necesarias para asegurar un rescate exitoso.

Entre las mayores preocupaciones que se tienen en cuenta se encuentran las horas de oxígeno restantes, las reservas de comida y agua potable, y la profundidad en la que se encuentra el submarino desaparecido. Estos factores son cruciales para la supervivencia de los ocupantes.

Principales riesgos a los que se enfrentan

Cuando el organismo humano no recibe suficiente oxígeno, las consecuencias pueden ser graves. La sangre no se oxigena adecuadamente, lo que puede afectar los músculos, nervios, huesos y tejidos relacionados con la respiración. Se pueden experimentar síntomas como labios y uñas azulados, somnolencia, pérdida del conocimiento e incluso arritmia cardíaca.

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La falta de agua y alimentos también es una preocupación primordial. Si bien el submarino cuenta con provisiones limitadas de bocadillos y agua, el tiempo que llevan desaparecidos puede haber agotado estos recursos. Según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, un organismo humano puede sobrevivir sin comida durante un período que oscila entre 8 y 21 días, siempre y cuando se mantenga una ingesta constante de agua. Sin embargo, la deshidratación puede ser un problema grave, ya que el cuerpo humano solo puede funcionar adecuadamente durante tres a cinco días sin agua, después de lo cual comienzan a surgir síntomas como sed extrema, micción infrecuente, orina oscura, fatiga, mareos y confusión.

Además, debido a la distancia a que pretendían llegar, se sabe que el submarino luego de tantas horas sumergido podría colapsar en cualquier momento. 

Las autoridades, junto con expertos en rescate y equipos de búsqueda, están trabajando incansablemente para abordar estos desafíos y garantizar la seguridad y el bienestar de los ocupantes del submarino Titán. 

 

Source: meridiano