Una nube de felicidad merengue

Isaac Rengifo Carrero ll @iscarrero

 

La oportunidad era única, volver a la cima del torneo español; ese era el objetivo de Zinedine Zidane. Ya sabía del traspié del Barcelona en Sevilla y dejar pasar tres puntos no entra en el guion del Real Madrid.

En San Sebastián tierra donde David vence a Goliat, la historia fue diferente y la sonrisa fue para los merengues. Sufrir es el verbo que todo conjunto siente al visitar tierras vascas y más cuando la sorpresa en el once inicial que certezas. La confianza fue nuevamente a James Rodríguez, quién no jugaba desde el mes de octubre pasado e hizo su aparición en un choque con el rótulo de abría más dudas ‘importancia’.

Peleado y trabado, sin dejar espacios y movilidad en el campo; así fue el encuentro en Anoeta. Sin dueño del balón y con los gritos de ambos entrenadores que estremecían las gradas, la posesión abrió su eje para las batallas en la medular.

Todo se guardó al subir el telón en la segunda parte del encuentro. Sin acomodarse o dar respiro. La velocidad de Vinicius hizo estragos en una defensa que no pudo más que frenarlo con falta en el área chica del campo.

Un grito ahogado y un gol lleno de ecos de aquellos que celebraban desde sus hogares la ventaja y una punta madrileña. Sergio Ramos, el capitán convertía el primer tanto para abrir el cerrojo.

Para no pasar sustos en el marcador, el Madrid fue volcado por la tranquilidad.  Con el sinónimo de Karim Benzema definió ante rivales el gol de la tranquilidad y la categoría de su gran momento con las redes.

Merino maquillo el resultado, pero el daño ya estaba hecho, tres puntos y a cobrar. Con los mismos puntos pero con ventaja entre sí, la nube de felicidad de LaLiga vuelve a ser merengue. David no pudo y Goliat volvió a su sitio predilecto, el Real Madrid otra vez es puntero.

Source: Deportes

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *