Cáncer de piel y folículos capilares

La conclusión más relevante del estudio multinacional publicado en «Nature Communications» por el profesor Mayumi Ito Suzuki, de la Universidad de Nueva York, es que algunos cánceres de piel pueden tener su inicio en los folículos capilares, en lugar de las capas de la piel. Los folículos pilosos son órganos complejos que están situados dentro de la piel. Es allí donde las células productoras de pigmento inmaduras desarrollan cambios genéticos que causan cáncer y también están expuestas a señales normales de crecimiento del cabello, según este trabajo. En la base del folículo piloso hay fibras nerviosas sensoriales que envuelven cada bulbo de pelo, como describe Medline Plus.

El profesor Mayumi Ito Suzuki explica que, a diferencia de sus contrapartes normales, las células madre de pigmento recientemente cancerosas migran hacia arriba y hacia afuera de los folículos para establecer melanomas en la piel de la superficie cercana antes de extenderse más profundamente. El estudio se realizó en ratones genéticamente modificados, y los resultados se confirmaron en muestras de tejido humano. Los científicos que participaron en este trabajo –de otras Universidades estadounidenses, así como de Japón, Alemania y Francia- consiguieron un nuevo modelo de roedor para estudiar el melanoma, de la forma que pudiera editar genes solo en células madre de melanocitos foliculares. Así les permitió introducir cambios genéticos que únicamente producían células madre de melanocitos.

Capaces de rastrear con precisión, por vez primera, un tipo clave de células madre confirmaron que las células de melanoma pueden surgir de las células madre de melanocitos, que migran anormalmente hacia arriba y hacia afuera de los folículos pilosos para ingresar a la epidermis, la capa más externa de la piel. Estos investigadores destacan que el melanoma puede surgir en las células madre pigmentarias que se originan tanto en los folículos como en las capas de la piel, «de modo que algunos melanomas tienen múltiples células madre de origen».

Source: La Razon

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