No tire el líquido del yogur, tiene una proteína de alto valor biológico
Es casi una tradición. Es mediodía y el estómago empieza ya rugir un tanto. Lo más cómodo sería optar por un sándwich de la máquina o por un donut recién horneado. Pero no. Esta vez se siente con fuerza y decide hacer honor a su voluntad. Así que opta por el yogur que compró hace unos días. La nevera le queda cerca, por lo que no encontrará demasiados obstáculos entre él y usted. Abre la puerta, lo coge y lo abre. Sin embargo, antes de introducir la cuchara que instantes después se llevará a la boca, hace un gesto que pasa casi desapercibido: se dirigeIr a noticia