La segunda piel invisible que todos tenemos hace mucho más que protegernos del mundo exterior

¿Alguna vez te sentiste incómodo o incómoda porque algún desconocido se te sentó demasiado cerca o alguien -incluso alguien que conoces- se te puso a hablar a centímetros de tu cara?
Nos ha pasado a todos y no es algo imaginario: el espacio personal es real. Y no solo es real, es necesario para poder interactuar con normalidad.
En su nuevo libro «The Spaces Between Us» (Los espacios entre nosotros) el psicólogo y neurocientífico de la Universidad de Princeton Michael Graziano explica que lo que llamamos espacio personal es en realidad algo similar a un campo de fuerza.
Source: El universo

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