Precisó que a lo mejor el precio de 36 bolívares correspondía para los meses de mayo o junio, pero está totalmente desfasado en cuanto a la realidad que hoy se está viviendo como consecuencia de la hiperinflación, advirtiendo que se evidencia que el Gobierno lo que quiere es quebrar a los productores.

Recordó que los agricultores en Venezuela trabajan a cielo abierto, dependen del comportamiento climático, de las lluvias, el uso de las maquinarias con la tierra y todos esos elementos indispensables como los fertilizante, el precio debe ser el que se está proponiendo.

“Estos son unos rubros muy demandantes de maquinaria, de tecnología y el gasto es realmente fuerte, porque se trata de rubros extensivos”, asegura Fantinel.

Señala que han pasado varios meses sin que los productores tengan reuniones formales con los técnicos del sector oficial, porque los ministros están ocupados en temas económicos, en viajaderas, pero deberían mantenerse las reuniones con loas técnicos para ir analizando periódicamente los costos, que se van moviendo producto de la hiperinflación.

“Todos los insumos que nos vende Agropatria, que deberían estar subsidiados a tasa Dicom por el Gobierno, que se lo agradecemos, pero ese es el patrón de costo y que no llega ni siquiera al 10% de nuestros gastos y esto es lo que debe entender el Ejecutivo, y lo mismo pasa con los industriales, donde la materia prima no pesa más de un 15%, cuando antes pesaba 60%, ahora el envoltorio del arroz y de la harina de maíz, cuesta más que lo que nos quiere pagar, porque todo está tergiversado y creo que es reuniéndonos, haciendo mesas de trabajo como el gobierno puede entender que el productor primario tiene que tener rentabilidad para poder seguir. ¿Cómo afrontamos el siguiente ciclo si no tenemos ese ingreso?, se preguntó”.

Revela que tienen información en Fedeagro, de productores desesperados, que han venido maíz en 8 o 9 bolívares soberanos el kilo, porque los acreedores le cobran, los transportistas le cobran los talles le cobran, las ventas de repuestos cobran, afirmando que esto también debería ser considerado por el Gobierno.

Estima que entre las acciones que hay que adoptar de inmediato, esta el respeto a la cadena productiva, también el tema del control de precios dándole una mano también a los industriales, porque se requieren de productores, de industriales, de comerciantes, de la banca para que otorgue financiamiento.

Recuerda que en el pasado se sembraban 600 mil hectáreas de maíz, y en estos momentos apenas se están sembrando unas 220 mil hectáreas, como consecuencia de todas estas limitaciones, advirtiendo que seguramente para el 2019 las hectáreas a sembrar serán menos.

“Si no nos reunimos y planteamos nuestra problemática no saldremos adelante, siempre lo hemos dicho depende del incremento de la producción nacional, el que podamos nuevamente llenar los anaqueles, se lo hemos dicho al Gobierno, aquí se pueden sembrar 4 millones de hectárea hoy, de rubros vegetales, lo que permitiría que el país pudiera abastecerse de maíz blanco, amarillo, arroz, leguminosas, hortalizas, pero si no nos ponemos de acuerdo todos y luchamos por este bello país que tenemos, seguiremos dependiendo de las importaciones y todo saben lo que está pasando, la caída del petróleo, los recursos destinados para traer comida no son los mismos que hasta el año 2014 que eran unos US$ 7 u 8 mil millones y esto se ve en los anaqueles, las bodeguitas de los pueblos han desaparecido, la gente depende de las cajas CLAP básicamente”, dijo Fantinel en entrevista radial.

Fuente: El Impulso
YS