Antes de llegar a Metropolitanos, Arnold López pasó por muchos lugares. Como juvenil, Mineros fue la casa que ante el mundo fútbol le dio a conocer; Monagas, el lugar donde empezó a exhibir su talento fuera de casa y Aragua, un sitio para demostrar de qué está hecho. Cumplidos todos esos ciclos, Metropolitanos se convirtió en el lugar que la actualidad demanda. Hace un mes y medio llegó a préstamo desde Maracay, planeando, para el venidero semestre, marcar grandes diferencias.
Lo que ha mostrado en pretemporada, ilusiona. Llegada al área rival con balón dominado, buena sociedad con sus compañeros, y una portentosa pegada a larga distancia, confirman que la institución encontró una pieza faltante para armar el rompecabezas de la excelencia. Todo es válido, aunque solo sirve aquello que ocurra en partidos de carácter oficial, por lo que desde este domingo en adelante inicia la historia de la que todos quieren ser parte en rol protagónico.
“Prefiero disfrutar al máximo cada partido, porque no me gusta hablar de cosas a mediano y largo plazo. Uno va construyendo sus metas en el camino, con trabajo, humildad, esfuerzo y mucho compromiso”, aseveró con la sinceridad del caso, fiel al estilo de un volante distinto.
El bolivarense ha entendido bien la idea de su técnico, Dani De Oliveira, por lo que considera que este será un semestre lleno de grandes retos, pero también – de concretarse lo que en la intimidad del equipo desean – de satisfacciones. Clave será lo dicho al principio: disfrutar el camino sin presión.
“Estamos comprometidos con el club, sabiendo que debemos dar el máximo cada vez que recibamos la oportunidad. Llevo meses sintiéndome bien porque me han dado la libertad de ser creativo, cosa que me estaba pasando en Aragua con el profesor Antonio Franco”, develó.
Su presentación ante Atlético Pantoja, que marcó el cierre de la pretemporada para los violetas, presagia buenos augurios. En cuatro días y contra la Academia Puerto Cabello, comienza el semestre deportivo para los capitalinos, que listos se encuentran para trascender en la tabla.
“Han sido días de mucho esfuerzo, pero todo valdrá la pena cuando hayamos conseguido lo que queremos. Para lograr cosas grandes tienes que trabajar sin detenerte y si algo te permite esta profesión es sentirte dichoso haciendo lo que te gusta”, aseveró López.
Desde ahora, sus movimientos en zona media, visión hacia adelante y poderoso botín, hablarán por él. Ya no queda más tiempo para ensayar. El reloj lo acerca al primer gran escenario.
Prensa Metropolitanos
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